8,8 grados.

Fin de semana del terror. Sábado en la mañana me entero de que ha habido un terremoto en mi país. Me conecto enseguida para ver si hay alguna noticia en facebook, pero aún nada, es muy temprano allá. Cristian está conectado en skype con su hermano Gonzalo, así que le pedimos que llame a mi casa, y se logra comunicar enseguida, diciéndome que todos están bien. Qué alivio. Vemos imágenes de TVN por una página web, y el desastre es mucho mayor de lo que yo pensaba… no pensé que había sido tanto. Rompo en lágrimas y Cristian me acompaña. Mucha gente lo ha perdido todo, la desolación es inmensa, y esta angustia de no poder hablar con mis abuelos me está matando. Sé que están bien, pero deseo hablar con ellos, escuchar su voz.
Cristian no ha estado nada bien, sé que apenas duerme, y ha estado pegado sin parar frente al computador. Me preocupa y al principio intento estar con él, pero siento que esto lo está sobrepasando, y por ahora no puedo sostenerlo.
Me alegro de saber que todos con los que he hablado están bien, así como también sus familias, pero hay gente de la que aún no he sabido nada, y además el panorama en el país es tan desolador, que verlo desde afuera es estremecedor. Ruego a Dios que todo esté mejor, que el país salga adelante y tengo fe que así será. Besos y abrazos muy apretados a quienes lean esto :)

Pero la vida sueca sigue!Qué más pasó esta semana? El día miércoles tuve un día muy ocupado, fui a clases mañana y tarde, y luego la clase de sueco en la noche. Cristian está super resfriado así que se quedó encerradito todo el día. Lo entiendo perfecto, porque así es como me sentía yo la semana anterior, que fue lo peor, sin ganas de nada con el “neverending swedish cold” como le llaman acá (el resfriado sueco sinfín).

El jueves en la noche era el cumpleaños de Neil, uno de los ingleses, en el cuarto piso de Pax. En la tarde vino Heidi escondida y preparamos cupcakes con azúcar y los adornamos con un número 30 en color verde. Después los pusimos todos juntos en un gran número 30 (para que no le quedara duda al pobre). Un chinito de su corredor preparó un pescadito de lo más delicioso, con salsa de soya y vinagre, y Neil preparó dos platos de comida tailandesa, uno de pollo y uno de pescado. Cristian y yo llevamos un rico cebiche, con pescado blanco, cebollas moradas y camarones. Nos lucimos y a todas las compañeritas suecas de los chiquillos les encantó.

El sábado en la tarde fui aun café en el centro, que es muy tradicional, antiguo y lindo que se llama “Vete-Katten”, donde pido un café latte (para variar), y un rico semla, que son estos berlines con crema y que adentro tienen una pastita azucarada con almendras. Mmmm.



En la noche, me voy a la cena de cumpleaños atrasado de Rita. Era una mesa larga con gente de todos lados, y estuvo tranqui pero super ameno. Ver caras nuevas, pensar en otras cosas. Postres ricos, ñami.
Anoche fuimos al subterráneo de Pax 5, porque hay cosas nuevas para buscar en el depósito! No había comentado que dos veces al mes, los dias 1 y 15, la gente se muda, entonces hay montones de cosas que la gente deja atrás, es como ir a la ropa americana! jajja. Encontramos cosas bacanes, entre ellas más implementos para la cocina (porque ya me habia traido un set de platos), ropa para mi cama, una boa de plumas de lo más entrete, y una mesa de lo más linda con un diseño sueco muy vintage. Cristian se trajo una mesa para su pieza, porque estaba muy pelada de muebles. Good hunting! hasta encontramos comida china sellada en unas bolsas, y un cif en crema para el baño. Que bueno el reciclaje, ahora soy cada vez más amiga del medio ambiente, y siempre reciclo mis cajitas de leche :)